viernes, 7 de enero de 2011

Día 4: Sub-Mundo

Dones y yo no nos podimos mover. Guzt nos quebró el equilibrio y se abalanzó sobre el cuello de Jack. Ambos cayeron de bruces al suelo y comenzaron a forcejear. Traté de separarlos, pero Dones me detuvo.
"Él necesita esto, Karev" me dijo apenado.
"¡Imbecil! ¡Idiota! ¡Eres un maldito idiota!" le gritaba Guzt con desesperación.
Jack logró sobreponerse y lo azotó contra el suelo.
"¡Escuchame!" le gritó Jack. "Queremos darnos una oportunidad. Ella quiere que confíe" dijo, buscando calmar la agitación de su respiración.
Por un momento la calma se hizo de las mentes y los tres tratamos de entenderlo, porque las caídas y las levantadas habían sido tantas, que resultaba difícil entender el nuevo retorno después de todo lo que había pasado. El problema era que Guzt era el más exaltado de todos, y no hayaba la forma de encajarse la pieza "Reconciliación", así que tomó nuevas fuerzas, se levantó y se abalanzó sobre Jack otra vez, dejándolo estampado bajo un seco ruido contra la pared.
"Muy bien. Tomaste tu decisión. Y la respetamos. Ahora tu respeta la nuestra. Nos aburrimos de seguir viendo como te hundes en la mierda. Así que ahora en adelante no queremos escuchar más del tema ¿Okey? Y no pidas más consejos y ni una mierda. Arreglatelas solo cuando llegue el momento en que caigas otra vez. Porque volverás a caer. Y la caída será más fuerte, teniendo que tú, solo, tener que volver a pararte. ¡Solo!"
"Guzt, calmate" le dije. "No sirve de nada gastar palabras una y otra vez, porque en un tiempo más nos vamos a ver en la misma situación"
Al parecer lo dicho calmó al orgulloso y se alejó del caído, siempre manteniéndole la mirada de desprecio y decepción. El sub-mundo por un momento se ahogó de calma otra vez. A lo lejos, en los pasadizos que daban con aquel oscuro y húmedo cuarto, se escuchaba el incesante caer de gotas y el cliqueo de las patitas de ratas asquerosas filtrándose por las paredes. Jack se recompuso, se ordenó la polera que Guzt había desordenado y volvió a levantarse. Obviamente no quería quedar con las palabras en la boca.
"Sé que no tengo el apoyo de ustedes" dijo "Lo acepto..."
"¿Y qué más querí, güeón?" le preguntó Guzt, interrumpiendole "¿Qué te aplauda? Te aplaudo po', culiao" le dijo y comenzó a aplaudir con fuerzas e ironía.
"Dejalo terminar" le detuvo Dones.
"Esto es mío. Me quedo con esto" continúo Jack. "Yo lo quise. Yo lo decidí. Si me voy a la mierda, me voy. No hay que hablar más del tema. Sólo me queda pedirles disculpas por todos esos momentos en que les pedí ayuda. Por haberles calentado la cabeza"
"No pidas disculpas" le dijo Dones.
"Disculpate a ti mismo" lo atacó Guzt.
"Prometiste..." le dije y algo me impidió seguir. Era aquel incomodo nudo en la garganta, ese que aparece en el momento menos apropiado "Prometiste tantas cosas, Jack... Yo sólo quiero saber dónde quedaron todas esas promesas ¿Qué querí que pensemos nosotros ahora?"
"Si este güeón no tiene idea donde está parao" lanzó Guzt.
"Sé que piensan que soy un imbecil. Lo sé. Sé que piensan que soy un conchesumadre. Que las estoy cagando otra vez. No tienen para que resfregarmelo en la cara, amigos" trató de defenderse con una voz tambaleante.
"Amigo no es el que te dice 'sí' a todas las cagás que te mandai" le dijo Dones.
"¡Lo sé, Dones!" gritó Jack, desesperandose. Eran demasiado los ataques "Sé que siempre han estado ahí. LO SE. Y es porque son los únicos güeones en esta cagá de país en los cuales confío. Cuando les pedí consejos, siempre hubo uno para mí. Y cuando me dicen las cosas, sean malas o buenas, me las como calladito. Ahora aperro solo. Lo sé. Lo tengo más que claro. Así que no los voy a güebiar más. Nunca más los voy a molestar"
Se había revestido con un escudo. Jack pensaba que lo queríamos hundir. Estaba equivocado. Lo queriamos sacar de aquel sub-mundo y llevarlo a la luz. Enseñarle a volver a caminar otra vez. Que pensara que era un espinilla en el culo era un error.
"No es que nos molestes" le dije "Eso nos da lo mismo. Lo que pasa es que nos duele verte sufrir ¿Entiendes? Duele. Duele más que la mierda. He pasado noches tratando de hacer que nunca se hayan conocido. Por ti. Porque te jodiste la mente y la vida y te hace ser nada. Me da lo mismo que pidas el consejo una y otra vez, Me da lo mismo que te caigas por un sueño. ¿Pero verte sufrir por esto? No... No lo aguantamos. Es tu dignidad la que se perdió. La que no está. Y yo te amo, güeón. Te lo juro. Pero ya no más. Es suficiente"
"Sé que están agotados. Cansados..." dijo.
"No estamos cansados" le interrumpió Dones "Estamos dolidos. Pero necesitas esto. Estar sin un apoyo... Caminar solo"
"Yo lo único que necesito es entederme a mi mismo. Y si eso incluye caminar solo, lo asumo"
"Sin nosotros, quizás entiendas mejor" le dije.
La oscuridad llenó el sub-mundo. El aire desapareció. Y la luz no entró.

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